Infrarrojo

La terapia con radiación infrarroja se emplea para aprovechar los efectos fisiológicos del calor superficial sobre los tejidos humanos para el tratamiento de diversas patologías y afecciones de la salud.

Es un medio de fácil aplicación, de efectos rápidos y muy útil. Se combina muy bien con otras terapias y prepara la zona de tratamiento para otro tipo de tratamientos.

Los efectos sobre el organismo son muchos y muy diversos debido a su poder de absorción y penetración como por ejemplo: efecto antiinflamatorio, aumento de la sudoración, efecto anticontracturante, vasodilatación superficial, alivio del dolor, relaja la musculatura lisa, antiespasmódico, etc.

Por lo que la terapia con radiación infrarroja está especialmente indicada en 

  • Contracturas
  • Artrosis
  • Artritis reumatoide
  • Lumbalgias
  • Espasmos musculares
  • Tras realizar cualquier actividad deportiva
  • Estados de tensión muscular